jueves, 21 de julio de 2011

Tiempo

La imagen de los sueños,
el desorden de los minutos
y sus segundos comatosos,
todo en orden caos también.

La estructura de los ecos
para callar por cuenta propia,
esto de herir con palabras
y blandir espadas nimias.

La noción del tiempo,
indigno y pasatiempo favorito,
el cruel lamento de los siglos.

Cómo cerrar un poema que nunca
lo ha sido, cómo dejar de hacerlo,
cómo crear un recuerdo de la nada,
y aún así jamás ahuyentarlo.

El tiempo y sus detalles
innegables, el tiempo y lo que pase
mientras tanto, el cómo y el quizás
en previa fase del recuerdo.

Así se escondan las palabras
y cada vez nos digan menos,
menos segundos y menos espacio,
nada en un todo muy soso y frío.

No hay comentarios:

Publicar un comentario