jueves, 28 de abril de 2011

Poema siete

No me arrepiento de haberte amado,
no sé si alguna vez lo hice,
ni me arrepiento de ello.

Aunque seas devota de mi ausencia,
y te guste verme regresar con muchos dedos,
algunos llevan el aroma de tu piel,
de tanto acoso, otros han muerto con tus besos.

No me entrego al olvido,
ni desisto, el viento tiene
un frío comprensivo y tus ojos,
turbios estíos.

Aunque surjan nuevos rencores
y tu cielo no guarde mis palabras,
igual habrás de soñar con el nosotros,
con nuevos dedos y algún alivio para tu sed.

No despiertes de tus sueños,
si algún recuerdo aún conservas,
en el que seamos aparejos del tiempo,
destrúyelos en un orgasmo.

Aunque no hayamos pecado
lo suficiente, ni el partir hacia ninguna parte
sea del todo nuestro, huyamos para vernos lejos.

No escribas ecos ni lenguas
que no hayamos dado.
Son muchos los destinos,
elige alguno y no te arrepientas.
Del olvido me encargaré con nuevos versos.

viernes, 22 de abril de 2011

Sabes que te amo y no lo sé

No sé si te amo o  es que
solo desciendo del infierno
para verte en falta.

Si despojo tus accesorios
de la desidia, es porque
aprendí a tocarte libre.

No sé de las pasiones
ni demás sentimientos
que imitamos juntos.

Si te vuelves una diosa
en mitad de la noche,
llévame lejos.

No sé de las vocales
que se inventan los orgasmos,
ni en los detalles de tu ausencia.

Si me escribes y no te leo
y los dónde se funden
en mi boca, es porque te extraño.

Sabes que te amo y no lo sé.

jueves, 21 de abril de 2011

Déjame una palabra que no tenga ausencias

Déjame una palabra que no tenga ausencias,
que no lleve tu nombre, pero haya sido
creada con tu boca para repetirla noche
y noche y se lleve la angustia.

Un paraíso perdido con los ecos y que
tal vez te invente dioses suicidas,
pues los tuyos han muerto, nadie sabe
cómo esquivo tu atardecer contigo.

Déjame un verso bueno, una forma de pecar
sin remordimientos, este dolor morirá
algún día, decide cuándo y cómo.

Una escritura sobre tu piel que lleve
sangre y vino, que pueda beberla contigo
y al leerla seamos para siempre.

domingo, 17 de abril de 2011

En mitad de algún orgasmo

Quiero saber de tus piernas,
qué ha sido de todas las formas
que inventamos para amarnos,

cuántas noches más habremos de amanecer,
quiero saber si las cicatrices se detienen
de tanta oscuridad compartida.

Quiero que me digas nada,
que con silencios y con susurros
desdigas nuestros puentes.

Si alguna vez compartimos un verso,
que sea para leerlo en voz alta
y no en mitad de algún orgasmo.

domingo, 10 de abril de 2011

Hoy

Hoy terminé mi recorrido
por tu cuerpo,
tan fácil y sincero
que pensé que mis dedos
eran tuyos.

Hoy te recordé
a cantos de metal,
a ratos y equivocada, sintiendo
las flores en tus labios
y el veneno sucio y bueno
de tus dientes.

Hoy voy a escribirte
de mil colores de formas
que nunca olvido,
que las conservo para darte
un verso fatal más entre tus piernas.

Pues sabes que hoy te quiero
lejos y ayer, cuando estás cerca
y creo todo lo que ocultas,
escribo extintas frases tuyas
donde me amas dos versos menos.

Para ser contigo, hoy y a veces ayer,
cuéntame tus oscuros deseos
a la luz de tu lengua, cuéntame
entre las dudas que haces para siempre,
que sean pasajeras y que yo sea tuyo.